CRAFTING

Esto es sencillo, podría adornarlo mucho más para meterle palabrerío y que pareciera un mega post del copón. Pero no, entender por qué el Job Crafting enriquece tu marca personal es tan sencillo como entender que si tienes que forzar meterte unos pantalones, no son de tu talla y ya.

Esto es: Si trabajas en lo que te gusta, eres feliz. Si eres feliz, trabajas mejor. Si trabajas mejor, destacas. Si destacas por hacer bien tu trabajo, tu marca personal se enriquece. Fin.

¿Ves como era fácil? Si no lo fue, te dejo un esquemita exprés.

El Job Crafting te permite diseñar tu trabajo, gestionar tu tiempo y ser mas productivo. Para esto es importante que identifiques esas “tareas lastre”, son aquellas que detestamos hacer y que consiguen que nuestro trabajo se ralentice.

De ellas son de quien debemos preocuparnos y ocuparnos, y no de las tareas que nos flipa llevar acabo. Las “tareas lastre” nos entorpecen el trabajo porque hacemos mucha procastinación con ellas y hace que seamos poco eficaces en el trabajo y seamos poco eficientes para la empresa.

No ocuparnos de las “tareas lastres” no beneficia a nuestra marca personal, pues no llevar acabo nuestro cometido (esto implica realizar todo tipo de tareas) nos deja en muy mal lugar. Y no hablo de cara a nuestro jefe, sino de cara a uno mismo. Debes ser bueno en tu trabajo primero por ti.

Voy a compartir contigo 4 truquitos subjetivos y personales (es decir, que igual a vosotros no os sirve o no os mola) que yo tengo para hacer frente a este tipo de tareas:

 Me las quito de en medio nada más empezar el día. Cuando uno empieza el día esta más activo, bueno según si la noche anterior dormiste abrazadito a Netflix o no (you know eh), pero lo más normal es que al primera hora de la mañana estes más despierto y con la energía a tope. Esto lo aprovecho para hacer lo que menos me gusta del día, como puede ser planificar lo que se debe difundir en las redes sociales de algunas de las cuentas que tenemos en la agencia. Como el tema estrategias, brainstorming, creatividades y demás movidas, me flipa, puedo dejarlo para el resto del día (a no ser que sea urgente o se requiera antes) porque sé que como es algo con lo que disfruto, no me costará tanto trabajo.

 Me motivo pensando en la autorrealización personal. Vamos, que pienso en lo bien que voy a sentirme cuando acabe las (fucking) tareas que tan poco me gusta hacer. Saber que me voy a sentir realizada y útil tras haber sido capaz de hacer bien mi trabajo y no haber procastinado, me motiva.

 Combinación. Hay veces que las “tareas lastres” son muchas y sé que voy a morir haciendo todas del tirón, entonces lo que hago es rollo “una sí y una no”. Compagino una tarea que no me gusta (siempre empiezo por la que no me gusta porque así termino antes con ellas), con otra que si me gusta y así consigo que sea más llevadero.